1. Forever Bicycles

Cuando era niño, las bicicletas “Forever” eran un lujo para Ai Weiwei. Muchos años después apila más de 1500 de ellas para crear una monumental escultura en la que se apilan para formar capas. El artista dice: “Estos son objetos que se relacionan muy íntimamente a mi pequeño mundo.”

«Por ejemplo, las bicicletas Forever eran una marca del sitio donde crecí. En nuestro pueblo no teníamos caminos reales y siempre teníamos que usar las bicicletas para cargar nuestras cosas. Pensé en que sería una buena escultura pública porque la gente se puede relacionar con las bicicletas: Están diseñadas para el cuerpo y son operadas por el cuerpo. Quedan pocas cosas ahora que siguen esa lógica”.

 

2. Semillas de girasol

Ai Weiwei se tomó el Turbine Hall del Tate Modern con 100.000.000 semillas (150 toneladas) hechas a mano. Cubrió 1.000 metros cuadrados dándoles a los visitantes la experiencia de experimentar una escultura de una escala épica.

Las capas de semillas, evocan múltiples significados; al ser un snack muy común en China, fue un objeto muy común en la niñéz del artista. Evoca las épocas de hambruna durante la revolución cultural y la era comunista en donde incluso hasta la comida estaba minuciosamente vigilada por el estado.

Para Ai Weiwei, “Sunflower seeds” es una pieza de arte compuesta por 100 millones de piezas de arte. Cada una como una escultura única y singular, simboliza los 1.3 billones de chinos, silentes en la multitud que está fragmentada por la era digital.

 

3. Chalecos de Refugiados

Esta instalación, realizada para una gala por la paz está inspirada por su residencia en la isla griega de Lesbos donde muchos refugiados llegan a la costa. En un esfuerzo por atraer atención a la crisis humanitaria, el artista forró las 6 columnas del edificio Konzerthaus en Berlín.

14.00 chalecos naranja, reflejan cada tragedia individual, cada hombre y cada niños que llegan a vivir un peregrinaje azaroso que comienza desde su viaje cruzando el Mediterráneo hasta Turquía.

Desde el 205 el artista documenta en su cuenta de instagram @aiww el tiempo que comparte con los refugiados y su dolor al saber que su éxodo apenas está comenzando.

 

4. “Straight”

Presentada en la Bienal de Venecia del 2013, “Straight” está construida con 150 toneladas de acero en barras que el artista recolectó de edificios de escuelas que colapsaron en el terremoto de Sichuan. Con diferentes técnicas, Weiwei las enderezó como si estuvieran nuevas. Esta acción es la metáfora de las cifras de muertos que el gobierno corrige de las víctimas (un tema que le valdría su encarcelación).

El co-curador de la muestra, Adrian Locke comenta de la pieza “Creo que es un trabajo muy arduo el que es para nuestro equipo, aparte del reto técnico, es un trabajo sombrío que alecciona cuando lo ves, hay un gran silencio poderoso sobre ello, que carga consigo una sensación muy real de pérdida de vida.”

5. Fountain of light

Uno de los trabajos en gran formato de Ai Weiwei es una lámpara de metal de 7 metros en forma de un cono inclinado. La pieza es una apropiación de un monumento hecho por el arquitecto ruso Vladimir Tatlin en un edificio del gobierno del recién estrenado comunismo para ese entonces.

La torre de Tatlin se convirtió en un símbolo del puente entre la política y la estética. Lenin y su gabinete de la educación consideraban que el arte era un excelente instrumento para transmitir el espíritu boyante de la dictadura del proletariado, y el monumento fue concebido y encargado como propaganda. La intención de Ai Weiwei al re-circular este símbolo (la escultura original nunca se terminó por completo y fue almacenada en una bodega) es llamar la atención sobre los espejismos que son las grandes utopías, tomando como contexto el actual régimen de China.

 

Fotos por: StopArt   |   Textos: Natalie Sánchez  |    País: Colombia 

Fecha de publicación: Abril 5, 2016

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